La discriminación a través de los años la hemos visto plasmada en películas como: “La Vitta e Bella” (Life is beautiful) , “The Boy in the striped Pajamas”, “Color Purple”, “The Help”, entre otras películas. Así como en la clase de Historia de EU, en nuestra propia historia, la de la iglesia (La inquisición) y como fue el caso de las alegadas “Brujas de Salem”. De éste tipo de discrimen es al que me refiero en éste blog, ya que hay muchas maneras de discriminar a mayor y menor escala.
Voy un poco atrás. Yo tuve la bendición así como muchos de nosotros de nacer en un época donde no se ve (o no es tan marcada) la discriminación y hay leyes que la prohíben, en algunos lugares existe la discriminación por color o raza y por preferencia sexual. Mis padres me criaron sin ningún tipo de discrimen hacia los demás y me enseñaron que todos somos iguales aún con nuestras diferencias.
A través de toda mi vida he tenido muy buenas amigas y amigos que son diferentes a mi color de piel, religión y condición social…y yo diferente a ellos. Nunca tuve una experiencia cercana en la que presencié o vi discrimen de una manera directa (solo el que padecen los deambulantes).
Cuando mi hija Adriana nació quería que ella fuera criada de la misma manera, sabiendo que ella era y es igual a los demás no importa las condiciones de vida de los demás ni la de ella. Así que me di a la tarea de buscar un bebé negro, así ella desarrollaría desde pequeña el amor por todos. No fue una tarea fácil, fui con mi mamá a cuanta juguetería había en ese tiempo, entraba y preguntaba (luego de buscar y buscar) "¿tienes un bebé negrito?" (usaba negrito porque me parece más bonito, pero mis amistades me enseñaron que negro está correcto y está bien decirlo), ¿pueden creer que solo en una juguetería lo conseguí? Me acuerdo que fue en “KB Toys” en Plaza Las Americas (estaba frente a la fuente de plaza) y cuando me trajeron un “Natiora” negro, ¡que felicidad! El primer bebé que tuvo Adriana fue un bebé negro y ¡como lo quería! y lo quiere, porque todavía después de 16 años lo conservamos, está guardado junto con los juguetes más preciados (luego pasó a Daniella).
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| Adriana con su bebé |
Ayer tuvimos nuestro “Movie Night” y vimos “The Book Thief” y “12 years a slave”, ¡Wow…que películas! En la primera vimos el discrimen, las cosas tan horribles que vivieron los Judíos en la época de Hitler y en la segunda la crueldad en su máxima potencia cuando la esclavitud existía y mostraron cómo es el tráfico humano. Sentí el pecho apretado… ¡que horrible! Mis hijas en varias ocasiones se viraban y me preguntaban “¿Pero por qué pasó eso?, ¿Por qué actuaban así?, ¿Qué hicieron mal?”, no es que ellas no sepan de historia, son las mismas preguntas que yo me hago hoy día para algo que no le puedo encontrar una explicación lógica.
¿Qué puedo responder?, me viene todo esto a la mente: Porque nacieron negros, Judíos, porque la gente es mala, porque Hitler se creía superior a los demás, porque así era la esclavitud, porque la gente no le gustaba la gente negra, entre otras respuestas que no satisfacen a nadie ni justifica tanta crueldad, tantas maldad, qué culpa tiene un niño de nacer en su religión o con un color diferente de piel… ¿diferente para quién?, porque yo soy diferente, mi hija mayor es diferente a su hermana y yo a mis hermanas.
¿Qué explicación lógica le puede dar a algo que no la tiene? ¿Cómo podemos explicar algo para justificar que alguien se comporte de esa manera? Y un buen día esas personas se dieron cuenta de que lo que hicieron estuvo mal y gracias a las personas que pelearon por sus derechos y tuvieron una gran victoria hoy ya no existe en esa magnitud, pero y ¿esas vidas que se perdieron?, ¿esos niños que fueron separados de sus padres y murieron sin saber por qué?, ¿esas madres y padres que no le pudieron dar el último adiós s sus hijos y murieron con el sufrimiento de no saber qué pasó con ellos?
¡Esas personas que murieron simplemente por haber nacido “diferentes” y que eran inocentes!
Me quedo sin palabras con mi corazón angustiado pensando en eso que pasó hace mucho tiempo pero que hoy día sigue tan vivo en el recuerdo de todas esas personas que hoy son libres por el sufrimiento de los que vivieron la desigualdad y de los que lucharon por la igualdad.
Seamos libres de pensamiento, seamos libres de malas acciones y no repitamos los errores del pasado. Todos somos iguales aunque nuestra piel y creencias sean diferentes.
¡Hasta la próxima!
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